Impacto del aumento en los haberes
La jubilación mínima, que actualmente es de $58.665 (brutos), recibirá un aumento del 20,92% y ascenderá a $70.938. Por otro lado, la jubilación máxima, que actualmente es de $394.763, aumentará a $477.347. Estos incrementos buscan garantizar un ingreso digno para los jubilados y pensionados.
Bonos adicionales y su importancia
Los bonos adicionales, que se suman al haber mensual, tienen como objetivo compensar la pérdida del poder adquisitivo causada por la inflación. Para aquellos que cobran hasta dos haberes mínimos, el bono será de hasta $5.000. Sin embargo, los jubilados que reciben más de dos haberes mínimos no recibirán bonificaciones adicionales, lo que representa un desafío para mantener su nivel adquisitivo en un contexto inflacionario.
Desafíos de la movilidad y la inflación
La fórmula de movilidad de las jubilaciones, que se basa en la evolución de los salarios y la recaudación tributaria, ha enfrentado desafíos para mantener el poder adquisitivo de los beneficiarios frente a la inflación. Aunque se han otorgado bonos adicionales, la pérdida frente a la inflación continúa afectando a aquellos jubilados que no reciben bonificaciones.
Compensación por la inflación y necesidad de nuevos bonos
Los bonos adicionales otorgados a los jubilados de haberes más bajos no se integran al haber mensual ni se tienen en cuenta para el cálculo de los aguinaldos o los futuros incrementos. Esto genera la necesidad de otorgar bonos de forma recurrente para compensar la pérdida frente a la inflación y mantener el nivel adquisitivo de los jubilados.
